Todo esto se ve como una gran ventaja, pero hay una pequeña línea entre estar informados y ser adictos, ya que si por alguna razón no podemos acceder a Facebook y no nos sentimos ni agobiados, ni tenemos algún estrés por ello, probablemente no hay ningún problema; pero la cosa cambia cuando el no poder estar mucho tiempo alejados de esta red social nos crea trastornos del comportamiento.
Todos estos factores han hecho que expertos evalúen de forma científica todos estos trastornos, creando algunos puntos que podemos ver y responder internamente con toda sinceridad para saber si sufrimos de alguna adicción a esta red social.
Como saber si tenemos adicción a Facebook
Los siguientes son los puntos que debemos evaluar y reflexionar para saber si somos adictos a Facebook, también pudiéramos extenderlos a otras redes sociales, ya que su trasfondo es muy similar:
1- Nos encontramos pensando mucho tiempo en utilizar Facebook o planificamos detenidamente mucho tiempo las cosas que haremos o publicaremos.
2- Más que ganas sentimos la urgencia o necesidad de conectarnos a Facebook.
3- Ingresamos a la red social como un medio de escape de nuestros problemas, personales, profesionales, etc.
4- Hemos intentado reducir el uso de Facebook sin tener éxito.
5- Nos volvemos irritables si se nos prohíbe el ingreso a la red social, o se nos limita el uso.
6- Dejamos de lado nuestras responsabilidades por utilizar Facebook, teniendo una baja de rendimiento en nuestros trabajos o estudios.
Si nos sentimos identificados con la mayoría de estos puntos, es posible que suframos de adicción a Facebook, esto pareciera que no es un problema grave, pero cuando vemos el verdadero impacto que surte sobre la vida de las personas, nos damos cuenta de lo terrible que puede llegar a ser, habiendo casos donde se disuelven matrimonios o se pierden empleos, todo por dar mayor importancia a estar buscando contenido y contactos en la red social.
Si reconocemos que tenemos un problema con esto, debemos buscar ayuda de inmediato, no hay porque avergonzarse ya que todos somos vulnerables a algún tipo de estimulo en particular.
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