Lo primero que tenemos que hacer es elegir el tipo de aplicación móvil que vamos a desarrollar. Existen diferentes tipos:
Aplicaciones nativas
Se desarrollan de manera específica para un tipo de plataforma determinada. Sus características son:
- Permiten explotar al máximo las prestaciones que llevan integradas en los dispositivos móviles.
- Permiten aprovechar el canal de distribución y el escaparate que representan las tiendas de aplicaciones de los diferentes fabricantes (App Store, Google Play…)
- Deben superar un proceso de revisión previo a la publicación, tanto de la versión inicial de la aplicación, como de las actualizaciones posteriores. Cada plataforma realiza un control diferente del contenido que se publica. Los más conocidos son:
iOS: su proceso de revisión y aprobación dura entre 4 días y 2 semanas. Si no cumplen con los requisitos que ellos establecen, rechazan la publicación de la aplicación en su tienda.
Android: se publican automáticamente en su tienda.
- Permiten el envío de notificaciones push en los dispositivos
- Las compras dentro de la App Store se asocian a una cuenta que el usuario debe registrar, los datos bancarios quedan almacenados en dicha cuenta. De esta forma no tienen que facilitar el número de cuenta cada vez que realicen una compra.
- Pueden funcionar de manera offiline
- Look&Feel nativo: tanto el aspecto de la aplicación como la experiencia del usuario son mejores.
Aplicaciones web
Este tipo de aplicaciones consiguen llegar a un mayor número de usuarios. Se puede desarrollar una aplicación web o adaptar el contenido de la pág web, al canal mobile. Sus características son:
- Multiplataforma: son compatibles con cualquier dispositivo.
- Tecnología más sencilla que en aplicaciones nativas
- Permite realizar SEO y analítica web
- Tanto su contenido como su funcionalidad no dependen de la aprobación de terceros.
Soluciones híbridas
Son aplicaciones nativas, que en algunas secciones muestran contenido web que puede ser cargado desde otro servidor o desde dentro de la aplicación.
Apple no permite este tipo de aplicaciones, porque su contenido no se puede revisar.
Después de haber decidido el tipo de aplicación, tenemos que elegir el modelo de negocio que vamos a utilizar. Existen varios:
Aplicación de pago o Premium
El usuario debe pagar para poder descargarse nuestra aplicación.
Aplicación gratuita
El usuario descarga la aplicación de forma gratuita, estas aplicaciones pueden rentabilizarse económicamente a través de la publicidad. Es un modelo de negocio que puede resultar exitoso pero muy a la larga, cuando tienen cientos de miles de usuarios.
Modelo Freemium (El más usado)
Combina la aplicación de pago con la gratuita. El usuario descarga la aplicación de forma gratuita, pero solo tiene acceso a determinado contenido, si quiere acceder a la totalidad del contenido deberá pagar por ello. También puede ser que en la aplicación gratuita haya publicidad y si la compras deja de aparecer.
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