Una de las causas comunes por la que muchos usuarios acuden al soporte técnico es por lentitud en el funcionamiento del sistema operativo, bloqueo de éste, no acceso a las aplicaciones o programas, etc, y lo peor de todo es cuando validamos el uso de recursos, como disco o memoria, y comprobamos que está en porcentajes altos cuando no se están usando aplicaciones de alto consumo en el momento.
Como todos sabemos, Windows, sin importar su edición, hace uso de múltiples procesos para permitir que cada componente de hardware y software estén relacionados entre si y existe un proceso llamado Tiworker.exe (Windows Modules Installer Worker) el cual puede llegar a usar bastantes recursos de nuestro equipo afectando de manera negativa el rendimiento de este.
Ahora, no podemos deshabilitar este proceso a la ligera ya que este tiene una tarea vital para el sistema operativo y es que Windows Modules Installer Worker tiene bajo su responsabilidad realizar el mantenimiento del equipo, esto lo logra buscando e instalando las actualizaciones que haya disponibles sin importar su tipo (seguridad o acumulativas). Y normalmente el proceso de actualización no debería consumir demasiados recursos del equipo donde se está ejecutando el proceso.
Según el propio Microsoft, el proceso Tiworker.exe permite la instalación, modificación y eliminación de actualizaciones de Windows y componentes opcionales garantizando un óptimo rendimiento de este.
De forma predeterminada, Windows 10 hace uso de Windows Update para todo el proceso de actualización del sistema y el proceso Tiworker.exe puede trabajar en segundo plano llevando a cabo esta tarea con lo cual se puede llegar a afectar el uso de los recursos de hardware.
Microsoft se encarga de liberar nuevas actualizaciones para Windows de forma frecuente y si vemos alguna lentitud en nuestro equipo es posible que este proceso haya descargado nuevas actualizaciones de Microsoft y las esté instalando, este proceso afecta directamente el rendimiento de la máquina ya que muchas actualizaciones son de gran tamaño.
En todo este proceso de actualización no debemos alarmarnos de este alto consumo de CPU o disco, ya que es algo normal en la tarea de descarga e instalación de actualizaciones, pero la razón por la cual no debemos preocuparnos es que cuando este proceso concluya con su objetivo, todo volverá a la normalidad y ya no veremos lentitud ni un alto consumo de recursos.
Ahora, surge la pregunta que muchos usuarios de Windows es, ¿puedo deshabilitar este proceso?, la respuesta es simple, No, esto debido a que las actualizaciones del sistema son un pilar fundamental para conservar la seguridad, compatibilidad y desempeño tanto del sistema como de las aplicaciones allí alojadas.
Existen diversas formas como podemos restringir las actualizaciones de Windows, tenemos alternativas como:
- Aplazar las actualizaciones a una fecha posterior
- Usar conexiones medidas lo cual restringe la descarga de las actualizaciones al limitar el tamaño de estas, esto aplica cuando usamos datos limitados.
Aunque esto está desarrollado por el propio Microsoft, es ideal siempre mantener actualizado el sistema para evitar cualquier tipo de ataque hacia el sistema.
Este proceso forma parte integral del propio sistema operativo Windows mismo y hasta el momento no existe ningún tipo de malware que se camufle como Windows Modules Installer Worker o TiWorker.exe con lo cual podemos estar seguros de que no se trata de ningún tipo de virus o malware que esté intentando afectar nuestro equipo. La mejor solución para prevenir esto, sin deshabilitarlo, las vamos a analizar hoy a través de este tutorial.
1. Ejecutar el Solucionador de problemas en Windows 10
Windows 10 cuenta con una herramienta integrada llamada Solución de problemas la cual se encarga de analizar de forma completa diversos parámetros del sistema y de este modo solucionar los problemas normales o proveer consejos que nos ayuden a corregirlos.
Para ejecutar el solucionador de problemas para Windows Update iremos a la ruta “Inicio / Configuración”:
Allí pulsamos en la sección “Actualización y seguridad” y nos dirigimos a la categoría “Solucionar problemas” y allí ubicaremos la línea “Windows Update” y al momento de dar clic sobre ella serán desplegadas las siguientes opciones:
Pulsamos en el botón “Ejecutar el solucionador de problemas” y podremos ver que inicia el proceso de análisis. Luego de que se realice el respectivo análisis, serán desplegadas las posibles soluciones para corregir esto.
2. Configurar Windows Update en modo manual en Windows 10
Otra de las opciones a usar es configurar el servicio de Windows Update en modo manual y de este modo ser nosotros mismos los que definimos cuando se han de instalar las actualizaciones.
Para configurarlo de este modo, usaremos la combinación de teclas siguiente y ejecutamos el comando “services.msc”:
+ R
services.msc
Pulsamos Enter o Aceptar y en la ventana desplegada ubicaremos el servicio llamado “Windows Update”, daremos clic derecho sobre el y seleccionamos la opción “Propiedades”:
En la ventana desplegada seleccionamos “Manual” en el campo “Tipo de inicio”. Pulsamos en Aplicar y Aceptar para guardar los cambios.
3. Detener descargas de actualizaciones en Windows 10
Aunque no es lo más recomendable por razones de seguridad del sistema, podemos detener el proceso de descarga de las actualizaciones en Windows 10.
Para ello vamos a ejecutar lo siguiente. En el caso de usar redes Wi-Fi iremos al menú Inicio / Configuración / Red e Internet y allí iremos a la sección Wi-Fi:
Allí daremos clic sobre la red a la cual estamos conectados y en la nueva ventana activamos el interruptor “Establecer como conexión de uso medido”:
En el caso de usar Ethernet, iremos a la ruta “Inicio / Configuración / Red e Internet” y allí vamos a la sección “Ethernet”:
Allí damos clic sobre nuestra red y activaremos el interruptor ubicado en la sección “Conexión de uso medido”. Además de esto, en el caso de las redes Ethernet, podremos realizar un proceso de configuración en los registros de Windows, es ideal crear una copia de seguridad de este con el fin de evitar inestabilidad o errores del sistema en caso de fallos.
Para acceder al editor de registros, usaremos la combinación de teclas siguientes y ejecutamos el comando regedit, en la ventana desplegada iremos a la siguiente ruta:
+ R
HKEY_LOCAL_MACHINE\SOFTWARE\Microsoft\Windows NT\CurrentVersion\NetworkList\DefaultMediaCost
Alli daremos clic derecho sobre la carpeta “DefaultMediaCost” y seleccionamos la opción “Permisos”:
Se desplegará la siguiente ventana:
Allí pulsamos en el botón “Agregar” y en la ventana emergente ingresaremos el nombre de nuestro usuario y pulsamos en el botón “Comprobar nombres” para que sea asignado:
Pulsamos en Aceptar y ahora seleccionaremos el usuario añadido y activamos la casilla “Control total”:
Pulsamos en Aplicar y Aceptar. Ahora, en el editor de registros, daremos doble clic en el valor “Ethernet” y estableceremos su valor en 2. Pulsamos en Aceptar y podremos salir del editor de registros de Windows. Finalmente, basta con reiniciar el equipo para aplicar los cambios.
Hemos visto que este proceso es parte vital del propio sistema operativo y es recomendable dejar que haga su tarea de forma normal, pero podemos recurrir a estas opciones si el alto consumo de recursos permanece.